Sostenimiento económico

Nuestra parroquia se sostiene sólo y exclusivamente de las aportaciones voluntarias de los fieles, de quien la formamos y participamos de ella, y de los que valoran la labor de la Iglesia.

Por ello, necesitamos tu aportación económica para sostener los numerosos servicios pastorales, sociales, caritativos y culturales, como las instalaciones, el culto y los ministros que la asisten.

Puedes hacer tu donación de distintos modos

Suscripción parroquial

Suscribiéndote de una manera fija y comprometida con la cantidad y la frecuencia que quieras.

Simplemente descarga nuestro formulario de suscripción y envíalo a la dirección de correo del equipo de asuntos económicos (economiastm@archimadrid.es).

Si lo prefieres, puedes imprimirlo rellenarlo manualmente. Entrégalo en la secretaría, durante su horario habitual, para que lo gestionen.

Transferencia bancaria

Al número de cuenta en el Banco Santander de la Parroquia Santísima Trinidad de Madrid

ES88 0075 1039 80 0600128036

Transferencia Bizum

Utilizando tu móvil puedes realizar una transferencia a través de Bizum de una manera muy sencilla.

Nuestro código Bizum para poder realizar donaciones es el siguiente:

00099

Web dono a mi iglesia

Puedes ayudar con tus donaciones con la página dono a mi iglesia.

Solo hace falta seleccionar donar a mi parroquia e introducir nuestro código postal (28027) para poder encontrarnos y donar.

Donativos en metálico

Los podrás depositar en el buzón a tal efecto en el templo o entregarlo en la Sacristía o en el Despacho Parroquial.

Colecta de las misas

Sabes que con muy poco puedes hacer mucho con la Iglesia

Con el sentido cristiano de compartir los bienes en la celebración de la Eucaristía

Estos donativos se pueden desgravar fiscalmente en la declaración de la Renta. Para más información consulta aquí

Preguntas frecuentes

Ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común

Hechos 4, 32

La comunión de bienes es un concepto que nos viene de antiguo: como somos hermanos, siguiendo la senda de los apóstoles, compartimos nuestros bienes para cuidar los unos de los otros. Esa comunión de bienes permite que ninguno de nosotros pase necesidad cuando otro tiene sobreabundancia. La comunión de bienes, nos permite realizar nuestras tareas pastorales, gracias al apoyo de todos.

La parroquia se sostiene con 3 bloques de ingresos muy similares en cuantía: donaciones, colectas y suscripciones.

Las donaciones son ingresos puntuales de personas de nuestra comunidad que se acercan y entregan una cantidad de dinero o hacen una transferencia bancaria. A veces se producen como agradecimiento por un servicio o por recibir un sacramento.

Llamamos colecta a las donaciones se recogen en las celebraciones de la Eucaristía los fines de semana. Es el dinero que se deposita en los cestillos.

Las suscripciones son donaciones periódicas (mensuales, anuales, trimestrales) que realizan un conjunto de personas. La parroquia, con la ayuda administrativa del Arzobispado envía a los suscriptores un recibo con su donación. Este es nuestro ingreso fijo, supone aproximadamente un tercio del total y es lo que nos permite contar con unos ingresos mínimos para hacer frente a los gastos fijos.

Las cuentas de la parroquia las gestiona el Consejo de Asuntos Económicos. Está formado por los sacerdotes con el párroco a la cabeza y 5 consejeros que se encargan de: coordinar las reuniones y levantar acta de las mismas; elaborar los presupuestos y las cuentas para que sean autorizadas por el Arzobispado; gestionar los ingresos; pagar los gastos decidiendo en muchas ocasiones qué gasto es prioritario frente a otro, gestionar las suscripciones, etc.

Parece claro que cada vez más, los propios feligreses se van a tener que hacer cargo de los gastos de sus parroquias. Las colaboraciones entre la Iglesia y el Estado que han permitido contener algún gasto, como por ejemplo algún impuesto municipal, no parecen tener mucho recorrido a corto plazo y tienden a desaparecer a largo plazo.